Brandon Libby, un padre de dos niñas, describe quedarse en casa para cuidar a su hija de un año como algo “maravilloso”, aunque se ha tenido que enfrentar con la condescendencia por tomar esta decisión. De hecho, si como sociedad, tenemos una noción preconcebida sobre el tipo de hombre que es un padre amo de casa, no se parece mucho a lo que es Brandon Libby.
Vive en Wyoming, donde los roles tradicionales son soberanos, Libby personifica un prototipo híper masculino que cualquier persona imaginaria como el hombre que va a cortar leña al bosque en vez de estar cambiando pañales sucios. De hecho, Libby tiene una barba tupida y logra que un sombrero vaquero de vea como debe ser y no como un disfraz, antes trabajaba como mecánico de Porsche. “Construía carros de carrera y brindaba asistencia en los circuitos de diferentes carreras automovilísticas, incluyendo las 24 horas de Daytona. ¡Hoy mi caja de herramientas ha sido reemplazada por una pañalera!” dice.
Cada vez más, la opción de quedarse en casa y cuidar de los bebés y niños pequeños no es solo una decisión que tienen que tomar las mujeres, y esto está haciendo que las dinámicas familiares cambien para todos. El Centro Pew de Investigación ha arrojado resultados donde muestran que el 16% de los padres que se quedan en casa son hombres, representando a dos millones de amos de casa en EEUU. Para algunos hombres, decidir sobre convertirse en amos de casa es más una conveniencia que una opción. Si no hay opciones laborales, esto lleva a que los hombres prefieran cuidar a sus hijos ellos mismos a pagarle a alguien más. Enfermedades o discapacidades también son tenidas en cuenta al momento de tomar esta decisión de quedarse con sus hijos en casa. Sin embargo, un número creciente de padres está tomando esta decisión de una manera informada y considerada para convertirse en los cuidadores principales del hogar y se están dando cuenta de que este rol es increíblemente gratificante.
Los días de Libby ahora giran en torno a su hija, primero hay que hacerle el desayuno, el cual él describe como: “cortar queso y jamón en pedazos milimétricos, revuelve los huevos, mientras ella grita desde su silla que ¡me mueva!” Luego de que su bebé se ha dormido en la noche y su esposa ha vuelto de trabajar, Libby tiene un pequeño receso donde aprovecha para hacer cuchillos y disfrutar de un whiskey.
·
Tradicionalmente, los niños tienden a ver a sus madres como las encargadas de cuidarlos, y ven a sus padres como los protectores y juguetes gigantes. Poder quedarse en casa y cuidar a nuestra hija me ha dejado hacerme cargo de algunos roles de cuidado.
·
Libby, quien también es cinturón negro en Taekwondo, debido a que no tiene un ingreso, ha tenido problemas con respecto a su nuevo rol como trabajo. La mezcla entre la falta de sueño con algunos aspectos repetitivos y aburridos del cuidado de los niños lo que han llevado a sentirse intranquilo.
“Siempre he estado involucrado con actividades con ritmos acelerados y con niveles de estrés altos, pasar tanto tiempo en casa requiere de un cambio radical de estilo de vida”, dice. Para combatir algo el aburrimiento, Libby estaba contento de poder seguir manejando su negocio de running, (Overland Kitted¸ una página web sobre aventura y viajes), desde su casa. Ahora, Libby se ha enfocado en escribir historias sobre los viajes de otros, pero cuando su hija esté más grande, planea salir nuevamente de viaje y fotografiar sus aventuras.
Libby quisiera que EEUU pudiera adoptar el estilo de las licencias de maternidad que manejan los países escandinavos donde permiten que los hombres puedan pasar más tiempo con sus hijos pequeños. “Tradicionalmente, los niños tienden a ver a sus madres como las encargadas de cuidarlos, y ven a sus padres como los protectores y juguetes gigantes. Poder quedarse en casa y cuidar a nuestra hija me ha permitido hacerme cargo de algunos roles de cuidado. Creo que nos une más”, dice.
Las carreras que pueden ser freelance y trabajar desde casa se adaptan muy bien a las responsabilidades de cuidar a un niño, mejor que cualquier otro trabajo. Tener la posibilidad de correr tus entregas según el horario de tus hijos y evitar viajes largos ayuda a los papás a estar en la casa. “El dinero que podría hacer en un trabajo de tiempo completo sería básicamente lo que le pagaríamos a alguien para que viniera a cuidar a nuestros hijos durante el día” dice Chad Andrus, periodista deportivo de radio y freelancer. Andrus describe “cada día como algo especial” al quedarse en casa para cuidar a sus gemelos de cinco años y su hija de tres, pero no hubiera sido posible sin sacrificio y el compromiso con su carrera fue significativo.
“Había sido exitoso y estaba en un camino claro para convertirme en una voz fuerte dentro de los medios deportivos en Denver mientras perseguía mi sueño. Claramente me salí de ese camino”, dice.
·
Hago la comida y limpio la cocina casi todas las noches. Nunca lo he visto como una amenaza hacia mi masculinidad, y me considero un tipo bastante masculino.
·
Andrus también ha tenido que adaptarse a su cambio de identidad. “Toda mi vida fui el ‘tipo de los deportes’ que estaba viviendo su sueño por construir su carrera en lo que le gustaba hacer. De repente ya no hacía parte de los medios, ya no estaba al aire todos los días, no estaba en todos los juegos ni en todos los camerinos. Estaba fuera de onda”.
A veces le ha parecido difícil interactuar con otros padres en el colegio o en los parques, quienes normalmente son mujeres y con quienes no tiene muchos intereses en común. Un día de Andru transcurre entre preparar la comida y limpiar después, llevar y recoger a sus hijos en el colegios y trabajos en la casa. El recomienda a otros papás a cuidar a sus hijos de tiempo completo sin importar los desafíos. “El valor de compartir con tus hijos, especialmente cuando están pequeños no solo los ayuda en su formación, sino que también les ayuda a cambiar la percepción sobre quién los debe cuidar para siempre”
Para algunos, escoger ser amos de casa es una decisión que lleva a muchas discusiones, pero para Zachary Parker, un profesional de mercadeo, fue una fácil de tomar. Tuvo que enfrentar un dilema tres semanas antes de que su bebé naciera cuando sus empleadores le pidieron que por favor cerrara su negocio por conflicto de intereses. No estaba dispuesto a cerrar su compañía y entonces decidió renunciar.
“Mi esposa estaba muy brava conmigo por renunciar a mi trabajo de tiempo completo y tratar de que mi negocio despegara. No me habló durante tres días”, dice. Luego ya pudo lanzar su negocio y cuidar a su recién nacido, lo que lo llevó a recibir más dinero que el que hacía en su trabajo de tiempo completo. Sin embargo, no todo el mundo entendió esta decisión. “Mi papá es ultra conservador, entonces mi rol de amo de casa le costó muchísimo”.
Parte de ser un padre que se queda en casa, al mismo estilo que de las “amas de casa” es hacer todos los oficios del hogar, como preparar la comida para la familia. “Hago la comida y limpio la cocina casi todas las noches. Nunca lo he visto como una amenaza hacia mi masculinidad, y me considero un tipo bastante masculino. Tomo cerveza, whiskey, masco tabaco, cazo, pesco y amo pasar tiempo con mis niños”, dice Parker.
El rol del proveedor tradicionalmente se ha considerado un trabajo masculino, pero Parker cree que los papás que se quedan en casa también proveen, así no sea monetariamente, aunque su experiencia de dejar su trabajo de tiempo completo ha sido reconocido tanto emocional como financieramente. “La libertad es una de la cosas que más valoro, y siento que soy más libre ahora que cualquier otro hombre que conozca”, dice. Para él, su rol como padre de tiempo completo es otra aventura.
Cualquier resistencia hacia los hombres como cuidadores de sus hijos revela una deficiencia en como estamos viendo el rol de padre. Cuando se trata de amar y cuidar a nuestros hijos, tanto hombres como mujeres pueden ser verdaderamente iguales.